Una piedra preciosa era la frase que acostumbraba a brotar de la boca del Rab. Simja Zisel:
Toda persona tiene una cualidad buena que se destaca entre todas sus demás cualidades positivas, y ella tiene la fuerza de trasformar a la persona en alguien totalmente virtuoso.
Así también posee una cualidad mala que sobresale entre todas sus demás cualidades negativas, la cual puede convertirlo en alguien totalmente malo.”
De acá aprendemos que todo hombre puede conocer su posición en dos planos:
1) Reconocer su mejor cualidad y esforzarse en acrecentarla.
2) Encontrar su defecto más grande y esforzarse en corregirlo.
Y así sin duda alcanzará el máximo grado de excelencia en su personalidad.
(Mijtav Meliahu Tomo 5 Página 68)